25n3

Una historia que no debe repetirse

Invitan a estudiantes a que elijan salvar y no ser cómplices o encubridores

Una historia que no debe repetirse
Invitan a estudiantes a que elijan salvar y no ser cómplices o encubridores

En busca de salvar la vida de personas que por diversas circunstancias personales o de salud mental sufren depresión y llegan al suicidio, empujadas por fenómenos como el ciberacoso, Evanyely Zamorano y Emanuel Pacheco, de la Fundación Katy Summer, impartieron la charla a distancia “Yo elijo salvar”.

Éste también es el nombre de un libro inspirado en el caso Katy Summer, una estudiante chilena de 16 años que se enfrentó a la violencia digital en un grupo escolar de redes sociales al que subieron fotos de ella besándose con un chico casado, lo que derivó en una serie de textos ofensivos y violentos que ocasionaron el pánico de Haty y posterior decisión de suicidarse.

Los conferencistas y padres de la chica, a quien describieron como una joven alegre, que amaba la música y el diseño de vestuario, expusieron el caso y recordaron que es común preparar a las personas para ser fuertes en contextos físicos de las relaciones humanas, pero nunca en el espacio digital.

“Hay que cuidar lo que se escribe en las redes y grupos sociales porque hay palabras  que matan o pueden generar sufrimiento y empujar a las personas a tomar la  decisión del suicidio. Por ello, antes de postear piensa si es buena onda hacerlo, si es verdad lo que se dice o si es necesario hacerlo”, pidieron a los jóvenes asistentes a la charla.

De acuerdo con cifras de la OMS, cada 40 segundos una persona se quita la vida; en el caso de Chile, entre 80 y 100 personas tienen ese sentimiento, que el ciberacoso potencializa hasta en once veces, alertaron.

Explicaron que la depresión es un asunto complejo, que pasa por el cerebro. Cuesta mucho entender lo que pasa o por qué pensamos que sólo se trata de un estado de ánimo, pero existen estudios de tomografías cerebrales en donde se observa la diferencia entre un estado sano y otro deprimido.

Al estar afectado el cerebro, es decir,  deprimido, “se muestra cómo la persona está sufriendo, sin importar su género, nacionalidad, situación económica o seguidores de Instagram, TikTok y demás redes sociales”.

La propuesta para contribuir a que esto no siga ocurriendo es ser un testigo salvador, que tome la decisión de salvar la vida de alguien, comenzando por uno mismo, al levantar la mano para pedir ayuda, lo cual es una acción de fortaleza, porque desde la debilidad se está pidiendo auxilio.

“Elijo salvar también significa ser empático, solidario y no guardar silencio o indiferencia ante situaciones de riesgo cuando nos damos cuenta de ello porque la única forma de prevenir el ciberacoso y el suicidio es que seamos parte del cambio al actuar de manera distinta”, consideraron los ponentes.

Se trata de no ser testigos cómplices, en este caso de lo digital, no compartir imágenes o darles “me gusta” y menos fomentar una situación que se agrande, pero también de no ser un testigo encubridor, que tapa la situación con indiferencia porque no le interesa lo que está pasando, porque no es un miembro de su familia, amigo o compañero.

La charla fue organizada por la Coordinación Universitaria para la Sustentabilidad (COUS), de la Universidad Nacional Autónoma de México. Para conocer más sobre el tema y pedir ayuda puedes contactar la fundación Katy Summer en: @fsummercl y redes@fsummer.org.

Compartir: