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Un alumno con mala alimentación no rinde en la escuela ni en sus actividades

Actividad física previene de enfermedades

Un alumno con mala alimentación no rinde en la escuela ni en sus actividades
Actividad física previene de enfermedades

Como parte del programa trabajo del Departamento de Educación Física se llevó a cabo vía zoom la Videoconferencia de la Salud por una Escuela Sana. Mis hábitos, mi estilo de vida, a cargo de la Mariana de los Ángeles Parra Caamal.

La especialista en nutrición habló de cómo se recomienda que sea la alimentación de los jóvenes en este tiempo de pandemia. Comenzó con una definición de lo que es un hábito “un hábito alimentario son las conductas de consumir cierto alimento” estos hábitos son adquiridos mediante el condicionamiento apetitivo”.

Posteriormente habló de la dieta, a la cual definió como “conjunto de alimentos y platillos que se consumen cada día y constituye la unidad de la alimentación”. Mencionó que el cuerpo está formado de 50% a 75% de agua, y que ésta se pierde a través del sudor, orina y al no contar con una reserva es importante reponerla con la hidratación diaria.

Mariana Parra compartió con la audiencia que “los adolescentes necesitan consumir alimentos y bebidas que aporten la energía y los nutrimentos suficientes para disminuir el riesgo de resultados adversos, como retraso en el crecimiento, anemia, mal desempeño académico o una mayor probabilidad de cardiopatía.

“La mala nutrición afecta al desempeño en la escuela o en la actividad que se realice”

Mariana Parra.

Mostró una dispositiva con la comparación entre la comida chatarra contra la comida saludable y mediante porcentajes les demostró que una hamburguesa tiene 440 calorías, el doble que una ensalada, o una pizza 470 calorías en comparación de las 188 de un filete de carne magra.

Complicaciones por la obesidad

En el contexto que vivimos hizo énfasis en que una mala alimentación puede derivar en enfermedades cardiovasculares como la Hipertensión, insuficiencia cardíaca congestiva o embolia pulmonar. Además de enfermedades de índole psicológico como Depresión, baja autoestima o trastornos de la alimentación.

Antes estas consecuencias de la mala alimentación, recomendó, a los casi 200 cecehacheros que estuvieron atentos durante la charla, a ejercitarse, ya que la actividad física les permite conocer su cuerpo, aumenta la relajación mental, mejora el estado de ánimo y fortalece el rendimiento intelectual.

Para finalizar, recomendó a los alumnos a llevar una sana alimentación de tres tiempos y dos colaciones, ingerir por lo menos cinco raciones de frutas y verduras al día, tener un horario fijo de comidas, evitar consumir comida chatarra, disminuir la ingesta de bebidas azucaradas e ingerir alimentos de origen animal sin grasa.

 El evento fue moderado por los docentes Blanca Lezama y Hugo Varela quienes indicaron que la charla forma parte de la unidad II fomento a la Salud de la materia de Educación Física.

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