El Laboratorio Itinerante del Instituto de Ingeniería de la UNAM (IIUNAM) estuvo en el plantel Oriente para explicar al alumnado el comportamiento de las estructuras ante un sismo o la fuerza del viento, identificar las posibles consecuencias para la población, pero, sobre todo, para que puedan prevenirlas y practiquen los conceptos que aprenden en su clase de Física.
Al inaugurar la actividad, el secretario de Servicios de Apoyo al Aprendizaje del CCH, la jefa del Siladin Central y la secretaria técnica del Siladin del plantel Oriente, Taurino Marroquín Cristóbal, Gabriela Govantes Morales y Angélica Nohelia Guillén Méndez, respectivamente, se congratularon del acercamiento del Instituto al CCH.
Los funcionarios indicaron que este tipo de vínculos contribuyen a la generación de vocaciones científicas y lleva al terreno de la práctica los conocimientos que los estudiantes adquieren en las aulas y laboratorios.
Aplicación
El Laboratorio Itinerante surge de la iniciativa de llevar los espacios de investigación del instituto a los jóvenes estudiantes, destacó Adrián Pozos Estrada, del IIUNAM.
“Les presentamos edificios que tienen diferente geometría, de manera que vean cómo se mueven cuando hay un evento sísmico y cuando hay viento. Queremos que vean las cosas que se hacen en ingeniería, e invitarlos a que se involucren y se interesen desde ahora, para que cuando elijan su licenciatura puedan irse a estas áreas de las ciencias”, explicó.
Gracias a que fue aceptado como un proyecto PAPIME, el laboratorio recibió el financiamiento requerido para la construcción de una mesa vibratoria, que previamente fue modelada y programada (Arduino), la construcción de modelos (3D) y la organización de la información que recibirían los jóvenes, en suma, el trabajo de distintas disciplinas, ingeniería mecánica, estructural, civil, electrónico, programadores, entre otros.
En este sentido, el investigador destacó que en el actual contexto ambiental y la formación de huracanes. Hay muchos jóvenes y futuros ingenieros que trabajan con nosotros que están muy interesados en esos temas, porque “también en México sopla el viento, no sólo hay sismos”.
De esta manera, los jóvenes pudieron conocer conceptos y su aplicación, como que la dinámica es el área de la Física que estudia el movimiento de las estructuras y sus causas, que las ondas que viajan a través de la materia, además de conocer cómo fue la construcción de la mesa vibratoria, que en el mercado oscilaba su precio en más de un millón de pesos y que el grupo de ingenieros la desarrollaron a menos precio.
Una gran experiencia
Después de formar parte de las actividades, Kristel Rodríguez Esquivel, estudiante de tercer semestre, dijo que le pareció muy interesante que se promuevan este tipo de actividades, ya que se dio más la práctica, “además de que es más divertido aprender. Desde muy pequeña me han interesado cosas de la Física, la prefiero sobre otras ramas de la ciencia, aquí se trata de dar una explicación de la vida, pero en un sentido más atómico, más cuántico. Me gusta la física cuántica y desde pequeña he estado obsesionada con el Gato de Schrodinger”.
Para Melany Alanís Clara, del mismo semestre, dichas actividades fueron muy dinámicas, pero también muy interesantes “ya que nos ayudan para poder acercarnos más a las carreras que queremos estudiar, a pensar más en las opciones que tenemos. La Física, así, no se ve como una materia aburrida, sino dinámica y con aplicación en la vida cotidiana”.
Johan Hernández Cruz, de tercer semestre, dijo que le gustó la forma en que se representaron los ejemplos, hizo más dinámica la enseñanza: “vi que la Física no es una cosa sola, sino que son varias agrupaciones que se encargan de un mismo punto. También que la tecnología avanza para el bien de las personas”.
Axel David Martínez García, de quinto semestre, indicó que ver la Física de manera entretenida e interactiva te hace apreciarla más: “entendí y aprendí nuevas cosas, aunque soy de quinto semestre hay algunos conceptos que no conocía y básicamente todo lo que pude ver fue un aprendizaje grato”.
¿Qué se aprende con la mesita vibratoria?
Se conocen conceptos básicos de vibración.
Los jóvenes aprenden sobre modelos físicos.
Se promueve el debate por los descubrimientos.
