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No ve clase social, edad, ni ámbito sociocultural

Cosificación y sexismo son prácticas de discriminación

No ve clase social, edad, ni ámbito sociocultural
Cosificación y sexismo son prácticas de discriminación

La violencia de género es un fenómeno que han vivido cientos de generaciones alrededor del mundo, sin importar la clase social, edad ni ámbito sociocultural. Esta es parte de la reflexión que se hizo en el marco de la ponencia impartida por Itzel Contreras Chávez, de la Facultad de Economía de la UNAM, en el marco de la Jornada 25N: Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y la Niña, realizada en el plantel Sur.

De acuerdo con la ONU, “la violencia de género es todo acto de violencia que resulte o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”.

En la Sala Audiovisual, Contreras Chávez mencionó el sexismo como una práctica de discriminación hacia el género femenino y a su vez explicó al estudiantado la concepción que se tiene del cuerpo de la mujer como cosificación.

En el feminismo, se entiende por cosificación sexual el acto en el que una persona es tratada o representada como un cuerpo que existe para el uso y placer de los otros, haciendo a un lado sus habilidades y su capacidad para desenvolverse en otros ámbitos.

Refirió que la violencia contra las mujeres es una ofensa a la dignidad humana, entre las relaciones históricas de poder entre hombres y mujeres, lo que se debe entender a partir de la diferencia sexual.

“Se define como cualquier acción u omisión basada en el género, en donde se cause daño físico, emocional, psicológico, patrimonial, sexual, la muerte, el feminicidio”, expuso.

En la explicación, reflexionó que, través del tiempo, los tipos de violencia de género en las sociedades patriarcales han aumentado. En este tipo de sociedad se suele devaluar el papel de la mujer y no se le otorga un estatus mejor.

De igual manera, la maestra explicó que la violencia contra las mujeres se racionaliza dentro de la estructura organizacional social y siempre resulta en una posición subordinada. “La violencia afecta a miles y millones de mujeres en el mundo”, indicó.

Como parte de su ponencia, mencionó que todas las instituciones públicas tienen la obligación de cumplir con marcos normativos jurídicos, en apoyo a la perspectiva de género.

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