ciberviolencia

A defender la integridad

Piden a alumnos actuar contra el acoso digital

A defender la integridad
Piden a alumnos actuar contra el acoso digital

Jonhatan Díaz Bustamante, líder de proyecto de Prevención en la asociación civil Pozo de Vida, invitó a los cecehacheros del plantel Sur a que se conviertan en agentes de cambio y transformación social y a que actúen en caso de ser víctimas o de conocer alguna circunstancia de violencia digital, ya que ésta daña la integridad y dignidad de las personas.

Al impartir la conferencia “Violencia digital”, en el marco del 25 aniversario del Siladin, Díaz Bustamante explicó a los jóvenes que, en una dinámica de ciberacoso o ciberviolencia hay varios roles: está el que hace el bullying, el que refuerza, la víctima y, del otro lado, los que guardan silencio.

Así que los exhortó a no compartir material que violente la intimidad, privacidad y dignidad de otros y otras; evitar solicitudes de desconocidos; extremar precaución al compartir tus fotografías o información en redes, tener contraseñas seguras, cuidado con los clics, precaución con los perfiles básicos y, sobre todo, ante cualquier acto, denunciar.

La violencia digital, expuso, daña y expone a la gente cuando se convierte en objeto de actos de acoso, hostigamiento, amenazas, intimidación, exhibición, insultos, vulneración de datos personales, publicación de textos y fotografías, videos e impresiones sin su consentimiento.

Luego, lamentó que sean las mujeres quienes más experimentan esta violencia en redes sociales y acotó que, en México, al menos nueve millones de ellas lo han padecido.

Para comprender la dimensión del problema, dijo, el país ocupa el tercer lugar en Latinoamérica donde más se practica el sexteo en un contexto de ciberviolencia; más de 17 millones de personas de 12 o más años afirmaron haber vivido una situación de acoso cibernético, siendo el grupo más afectado el de jóvenes de entre 20 y 29 años.

Recordó que esa exposición puede darse incluso en grupos privados, cuando alguien le cae mal a otro y empiezan a revelar sus datos, a hacer memes o ponerlo en distintos contextos graciosos e incluso sexuales, y eso es grave, porque la violencia digital deja baja autoestima, bajo rendimiento académico, agresividad, ansiedad, pesadillas, insomnio, irritabilidad, depresión y, en ocasiones extremas, se llega al suicidio.

Actualmente, acotó, se han detectado 13 distintas formas de agresión relacionadas con la tecnología, tales como amenazas, desprestigio, extorsión, te bloquean de algunos grupos y no puedes acceder; control y manipulación de la información, acoso, monitoreo o acecho, y lo peor, dijo, es que la violencia en línea tiene consecuencias que no se quedan en la red, pues afectan a las personas de manera física y psicológica. 

Compartir: