Con una gran variedad de actividades para los estudiantes del bachillerato, los invitados especiales, se inauguró la 6ª edición de Geópolis 2025, donde los jóvenes pudieron participar en los 9 conversatorios, 15 talleres, dos exposiciones, la grabación de un programa de radio, tres concursos y visitas guiadas para adentrarse a la carrera de Geografía, con el fin de entender que no sólo ofrece mapas.
Al inaugurar el evento, la directora del Instituto de Geografía (IG), María Teresa Sánchez, dio la bienvenida a todos y destacó que uno de los ejes del Plan de Desarrollo Institucional 2023-2027 es el fortalecimiento del bachillerato universitario.
“El IG ha organizado desde hace varios años el festival Geópolis, con la intención de difundir la relevancia de las investigaciones geográficas para plantear soluciones ante diversos retos territoriales, despertar vocaciones geográficas y fomentar la divulgación entre distintas comunidades universitarias”.
Benjamín Barajas Sánchez, director general del Colegio de Ciencias y Humanidades, afirmó que “nosotros hemos sido parte de Geópolis desde 2019 y este programa es un excelente ejemplo de vinculación de los institutos y de las facultades con el bachillerato, que es el centro de la Universidad por muy buenas razones; en las y los jóvenes está el futuro de la Universidad, del país y de nosotros los profesores, porque si no podemos interactuar con ustedes, captar cuáles son sus inquietudes, emociones, sueños, perspectivas, pues estaremos perdiendo lo mejor que tiene este país, que es su juventud”.
Alumnos adquieren nuevas experiencias
El director del Colegio destacó que en la trayectoria de este festival han participado 7 mil 500 estudiantes del CCH.
“Es una maravilla, porque sacar a los jóvenes de su entorno en los planteles y traerlos a CU y ver su belleza, eso no tiene precio, han ganado muchos premios, pero sobre todo han tenido experiencias nuevas y sí, muchos quizás ya se acercaron a la Geografía, que es la ciencia para saber dónde estamos”, destacó.
Las y los jóvenes de los distintos planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades arribaron al Instituto de Geografía para asistir a alguna de las 30 conferencias, 15 talleres, dos exposiciones y la grabación de un programa en radio, entre otras actividades.
Asimismo, las y los estudiantes del plantel Naucalpan participaron en un recorrido por el pedregal de la zona, donde los guías les explicaron que antes había muchos espacios con basura, pero se propusieron a limpiarlos, tarea que les ha llevado muchos meses, pero ahora luce espectacular. Los jóvenes disfrutaron el recorrido y al llegar al pequeño mirador no pudieron dejar pasar las selfies.
Antes visitaron los talleres que se encontraban en la entrada del Instituto y expresaron su agrado por la visita. Además, los curiosos les preguntaron varias cosas a las chicas guía acerca de la flora y fauna del lugar. Más tarde se llevó a cabo el concurso “La brújula más orientada”, el cual no causó la expectación de ediciones pasadas, ya que los chicos se desencantaron cuando se dieron cuenta que no avanzaba el que tuviera más conocimiento, sino el que, a través de la estrategia de errar, no era candidato a eliminar.
Estudiantes del plantel Azcapotzalco visitaron el Centro de Recepción de Imágenes Satelitales y los acompañó Víctor Jiménez, orgulloso egresado de dicho centro educativo.
“Me dedico al procesamiento de imágenes de satélite para detectar diferentes objetivos de estudio. El Lanot es el Laboratorio Nacional de Observación de la Tierra y es un grupo multidisciplinario. Se inauguró en 2018, con el objetivo de adquirir imágenes de satélite en tiempo real, es parte de la UNAM y de otros participantes, ya que costó millones de pesos”, explicó.
Destacan importancia de satélites meteorológicos
El académico del IG destacó la relevancia de los satélites meteorológicos y de análisis ambiental, dedicados a captar toda la energía de la Tierra, del sol y del ambiente espacial; dichos datos se utilizan para anticipar el avance de un huracán, si hay incendios, medir la temperatura de las nubes y detección de rayos entre otras cosas.
Estos datos sobre la longitud, RAM o servidores llamaron la atención de las y los cechehacheros, sin embargo, destacó el tema de las explosiones del Sol, ya que han afectado a algunos satélites de telecomunicaciones.
“¿Qué pasaría si fueran más intensas y quemaran los satélites? Pasarían 46 años para recuperarnos de ello, mientras a Estados Unidos le llevaría de 18 a 22 años, porque depende de la tecnología de cada país y porque no sólo se dañarían los satélites, se afectarían las plantas de energía”, explicó el especialista a las y los jóvenes en el cierre de la actividad, lo que permitió al estudiantado interesarse por esta ciencia.