La Facultad de Contaduría y Administración (FCA) de la UNAM puso a disposición de los universitarios una guía de bienestar emocional con varias recomendaciones para sobrellevar un periodo largo de confinamiento, como tips para una comunicación efectiva en casa. Cuando nos encontramos mucho tiempo conviviendo con determinadas personas en un solo espacio, como una casa y sin que podamos casi salir, es normal que puedan surgir algunas diferencias entre los miembros de la familia. Podemos aprender a comunicarnos de manera efectiva al decir lo que sentimos, pensamos y deseamos, pero sin afectar los derechos de los demás, en la forma y el momento oportunos. Se sugiere cuidar el tono de voz, tratar de no reclamar, imponer opiniones o acusar, evitar contacto físico negativo (golpes, empujones, etc.), aclarar cuanto antes los malentendidos, no desquitarse con terceros y solucionar la situación con la persona indicada. En ocasiones puede resultar complicado ser asertivos, sobre todo con personas que apreciamos y tenemos cierta cercanía, como nuestros familiares. Es aquí cuando entramos en conflicto porque si decimos que no o ponemos un alto, podemos sentirnos culpables, con miedo o muy enojados al expresarlo, pero si cedemos y no decimos nada podemos sentirnos mal con nosotros mismos por haber hecho algo que no queríamos o por no manifestar lo que nos molestaba.
Se recomienda describirle la conducta ofensiva o molesta, especificar el momento, lugar y frecuencia: “Ayer en la tarde, cuando estaba en una clase en línea de la escuela, comenzaste a poner tu música a un volumen muy alto”. Expresar tus pensamientos y sentimientos acerca del problema o conducta de forma positiva, con calma: “Eso me hizo sentir enojo porque pienso que no es justo que no respetaras el acuerdo que habíamos hecho de no poner música durante mi clase”. Especificar el cambio de conducta que te gustaría que lleve a cabo la otra persona: “Me gustaría que, por favor, no lo volvieras a hacer y si quieres escuchar música durante el tiempo de mi clase, utiliza audífonos”. Señalar las consecuencias positivas de que la otra persona mantenga el acuerdo y, de ser necesario, mencionar cuáles podrían ser los resultados si la persona continúa actuando de forma incorrecta: “Esto haría que ya no peleáramos a cada rato por lo mismo y que si en algún momento tú requieres también que te haga un favor, yo te apoye en lo que pueda”.
