Robotyperro

Filme animado que aborda lo que implica un duelo

Perro y Robot protagonizan situaciones de la vida real

Filme animado que aborda lo que implica un duelo
Perro y Robot protagonizan situaciones de la vida real

En los últimos años han abundado las películas sobre el proceso de perder a alguien o despedirlo, el duelo que conlleva y la reflexión final al aceptarlo. El caso más reciente y comentado en esta columna fue el de Past Lives, sin embargo, el mismo 2023 sorprendió con una película más que recorría dicho tema: Robot Dreams.

El filme animado comienza con la historia de Perro, un personaje solitario que, acostumbrado a una rutina sin acompañantes, un día decide comprar un robot que, prometen en la televisión, puede curar la soledad. Robot rápidamente deja de ser un objeto, casi al instante que es encendido se convierte en un personaje con la misma alma y corazón que Perro, donde su única diferencia radica en que aprende del mundo al mismo tiempo que se le muestra. Ambos parecen hechos el uno para el otro y se expresa así de diversas formas.

Debo resaltar, que Robot Dreams es un ejercicio de película silente que funciona solo a través de señas, gestos y música. A partir de la visualidad se expresa el amor entre Perro y Robot, la falta de diálogo enmarca más ciertos sentimientos y experiencias, tal como el gran baile que tienen en medio de un parque cuando suena September o la desesperación que vive Perro cuando, eventualmente, Robot queda varado en la playa, oxidado y sin posibilidad de que Perro pueda sacarlo de ahí, más aún cuando al día siguiente la playa es cerrada y le es imposible salvarlo. Ese momento de pérdida es el primer gran punto de inflexión de la película, ya que pasa de hablar sobre el amor al duelo.

Si bien ambos personajes viven en una ficción que poco asemeja a la realidad, las analogías son bastante claras y también con un toque de profundidad. Es fácil identificarse con ambos personajes durante el proceso de despedida. Por un lado, Perro, pese a su soledad, es un personaje que decide continuar mientras espera que abran la playa, continúa su vida y contempla sus posibilidades a nuevas experiencias y nuevos amigos.

Por otro lado, Robot es un personaje inamovible durante un tiempo que no puede avanzar más que en sus sueños e imaginación, mismos que sólo lo hacen fantasear con el reencuentro con Perro. Ambas son caras opuestas de un mismo proceso y que en la vida real se repiten las mismas conductas. En su momento ambos aceptan el duelo y el final, Perro dándose cuenta de que puede volver a ser feliz con un personaje nuevo, aún sin la necesidad de olvidar los buenos momentos vivió con Robot; mientras, Robot también avanza y comprende que en ocasiones el destino nos termina enviando a lugares diferentes.

Lo poderoso de Robot Dreams es la maestría visual con la que expresa todos estos sentimientos y cómo una presentación aparentemente “infantil” de un par de personajes separados puede evocar muchas cosas a las audiencias más maduras: al amor, rupturas, amistades, separaciones… Y aunque al final las heridas sanen y todos avancemos como personas, la gente que por nuestro camino se queda con nosotros, en los gestos, actitudes, muecas o bailes que aprendimos. Dudas y sugerencias a: luis@cchfilmfest.com

El dato

Robot Dreams es una adaptación del libro homónimo de Sara Varon.

La película está ambientada en el Nueva York de los 80’s.

La dirección estuvo a cargo del español Pablo Berger.

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